miércoles, 9 de enero de 2008

STAR

El glamour, que palabra tan kitch, en esta actualidad. Tanto dicen la palabra, la manosean tanto que después el término queda bien para cualquier ocasión y así va perdiendo su valor.
Lo magnifico, lo suavemente tocado por la excelencia, ha sido la incursión en el jazz de Miles Davis...
Es una cascada de sedas en tu cuerpo la entrada de la trompeta en HUMAN NATURE.
La escena de Davis en frente de su banda le ganó a cualquiera que por pose parece recio, actitud es lo que a Miles le sobraba.

1 comentario:

Guantes De Lana dijo...

Que grande Miles, era quien tocaba de espalda al publico no?, eso es actitud.
Y la palabra Glamour se destruyo como la palabra Bizarro, que significa esplendido, y aca lo usamos como algo que es de cuarta, por la palabra bizarre francesa.
Bueno pase a firmarte como siempre, toca la trompeta negro dale toca.